martes, noviembre 06, 2012

Porque me haces feliz
en tu perfil judío,
la colina del amanecer,
tu mejilla en sombra.
Tu risa ronca.

martes, agosto 30, 2011

Noche de pito.

El viento gritó las olas
que avanzan sobre el cielo,
¡el frió dolor!
golpean, húmedas el suelo.
Yo las huelo desde lejos,
escucho el hielo aliento
con sal y reflejo.
Es mi mano, pienso,
el puño sobre la pared
cuando lloro y de rabia pego.
También mi pelo....
vuela negro como alga,
oscuro de profundidad,
acuoso fluido interno.
Grito junto al viento
¿qué pasa? por qué sufro,
Son los barcos que pinchan
los botes hundidos.
Qué herida, cuál costra
en la costa, arena mostaza,
pus de anfibio.
Tanta suciedad...

jueves, junio 03, 2010

Mi corazaun.

Corazón, no es fácil
suavizar la tierra de tus faltas
tomando piedra tras piedra
besando la greda, la masa,
hacer vasijas con ellas.
Ay corazón, sólo dios sabe,
con que motivos justificas tus penas
y las hierbas que bebes
para ahogar la cruz de madera.
Mi corazón, suenas,
me golpeas.
Donde el pecho que duele,
las calas son velas blancas,
son luz, que corazón,
no ves, porque lates
y quemas.



lunes, noviembre 23, 2009

J, A y doble R.

¿Como pudiste lanzarlo al mar con tanta facilidad? Desde un mirador de la costanera, oxidado de sal y tiempo, donde la brisa deja olor a espuma, ola y a azul. Y cuando lo pienso sé que nunca estuve ahí, al lado tuyo respirando tu piel, ni cerca un poco de rozarte ante de desaparecer en la linea que divorcia la vaporización del horizonte. Ni me importaba. Tuviste la consideracion de arrojarlo frente al club árabe, cerca de una playa pequeña, publica y completamente subestimada. Con tino, que desagradezco, se deshilvano con el golpear continuo contra las rocas. Callemos el ruido del mar para escuchar tus razones y mi auto disculpa. Y dentro y fuera de cada silencio, envolviéndose roto comenzara a volar los trozos de rutina que no me dejaste compartir. Flotando en el aire condensado del océano pacifico y mi pena. Y acercándome a la barandilla corroída mire hacia abajo donde las lineas de café y beige del gorro mojado se balanceaban indiferentes a tu desdén a mis posesiones y pensé: ¿Como pudiste lanzarlo al mar con tanta facilidad?

jueves, agosto 06, 2009

Olores

El viento puede traer o alejar los olores. Recorren flotando lentas, rápidas, olvidadas, dejadas a remojar con la humedad de la noche y del día. Los olores dominan el tiempo y el espacio, juegan con la memoria, modifican escenarios. Se encienden o apagan, de todas maneras te toman de un salto, sin aviso, con fuerza. Son cartas antiguas. Conversaciones tardes del pasado. Nos alimentan o nos desnutren.

lunes, agosto 03, 2009

Posibilidades en blanco y negro.


-La fotografía esta en blanco y negro. Se revelo con un hombre mayor y una mujer acostados en una cama, entrelazados de las manos. Existe confianza entre ellos. Si a mi me preguntan diría que se trata de un padre y su hija. Yo diría que el ha sido un buen padre, se le nota la cara cansada de proteger, cuidar, esperar, ver, instruir y finalmente de ceder por amor. El rostro de ella es distinto, esta lleno de agradecimiento, risa, lo mira a el como diciendo “Pero papá sonríe”, porque resulta que el papa es como una leona aunque este viejo su instinto de cuidarla supera su peso, entonces el se obliga a dar mas de él. Si tiene que levantarse e intimidar, lo hará. Sigue con la vista a la mujer con la cámara, lo observa y lo asecha con recelo. Se infla para parecer más grueso y poderoso. De carnes que no tiene toma volumen, de voz que ya no le nace en la garganta, ruge.

domingo, julio 05, 2009

Las órbitas de los planetas son pequeñas en comparación al espacio exponencial entre nosotros. Si los silencio se pronunciaran mas callarían al ruido de un grito seco y gutural. Recordar aquellos momentos en los que tomados de la mano quisimos caminar sin tomar en cuanta el escenario de calles en bajas temperaturas ¿que calor mas seco necesita el cuerpo que el cariño desmedido? Y a la luz de hoy también, qué cariño desmedido y con hora inscrita en el registro de muertes de nuestro país desenamorado necesita el cuerpo para fingir emoción y entibiar la razón con pañuelos de consuelo, en partes de las orillas, rotos.
Cuantas sillas hay entre tu y yo, y en cuantas nos sentamos a esperar al otro, hasta llegar afligidos y con el cuerpo corto a por fin juntos decirnos que si hubiéramos llegados antes quizás el amor estaría aun ahí, escondido detrás del orgullo, de pie para exclamar cuan ansioso estaba de vernos unidos de nuevo. Extrañarte en el frío es tan doloroso. Desearía dejar de contar los grados celcius de forma regresiva hasta llegar a cero para por fin decirte ¡después de mil grados es digno contarte que te añoro! Porque es cierto, prefiero verme bien que enfearme y descubrirme ante ti con todas mis verdades tiernas que te escondo. No aprendo con tantos inviernos que la lluvia cae de las nubes mas abrumadas no importa si son negras o si son blancas. Los días pasan caminan en fila india con distancia entre cada uno, pisando fuerte su paso rítmico, melódico, orquestado en llanto y el tic tac del reloj violento que medio suspiran los encantos quebrados tras el viento de agosto. Eres el resfrío que necesita los remedio mas costosos. Entre tanto y tanto recaigo al pensar en tu pecho y el asilo que fue para mi rostro, en tu beso y el sabor que dejo tu olor pegajoso. Ya van 40, 30 y 20 grados celcius contados en reversa. Cuando me congele ¿que sera de nosotros? Terminando el invierno siempre sigue primavera, verano y otoño. Pero con nosotros que, si no somos estaciones y como humano manejo el tiempo a mi antojo, entonces haré de ti y de mi, una temporada prolongada de regresar imagines reproducidas mentalmente en sepia opacadas por la constante pregunta ¿por que no te dije cuando debí, te quiero y te adoro?